2. Cantarle canciones simples de ritmos sencillos (infantiles) y mecerle en los brazos siguiendo los mismos ritmos.
3.
4. Imitar los sonidos que emite el bebé frente a su vista y fuera del alcance de la misma
5. Golpear suave y rítmicamente con la punta del dedo corazón la zona central de su espalda (vértebras) empezando en la zona inferior y dirigiéndose hacia la cabeza, seguir por la zona central de la cabeza hasta termina en la frente. Los golpeteos deben acompañarse de una canción suave y rítmica.